Bond No 9 Perfume & Fragancias de mujer
Bond No.9 es una empresa fabricante de fragancias americana que apareció en 2003 como única empresa dedicada a esta industria salida de las calles de Nueva York. Fue creada por una empresaria americana (pero nacida en Francia) llamada Laurice Rahmé, con un amplio interés en la cultura y arte desde temprana edad. Bond No. 9 fue creada para proporcionar a cada barrio de Nueva York un aroma único, como si sirviera para marcar su territorio, y enseguida destacó con otros perfumes y se popularizó entre el público americano y mundial de la noche a la mañana.
Bond No. 9 abrió sus puertas por primera vez en 9 Bond Street en el distrito de NoHo de Manhattan con 16 fragancias originales de barrio y, hasta la fecha, han abierto 5 boutiques bautizadas con los nombres de los barrios en que se encuentran. Esta marca también se vende en boutiques de alto calibre como Saks Fifth Avenue, Harrods, Nordstrom, Hudson's Bay, Isetan y la marca y cadena de cosméticos francesa Sephora.
Sus puntos de venta exclusivos y factores que han contribuido a su éxito son el uso de los diseños de sus botellas en taxis ingleses, que han transportado a clientes y editores de medios e hicieron destacar a la marca por sus campañas de publicidad, únicas hasta la fecha. Las mujeres acuden en masa a diario a sus tiendas para comprar sus fragancias únicas de los barrios de Nueva York y Bond No.9 pronto se convirtió en símbolo de buen gusto, teniendo la empresa un toque un tanto especial, moderno, artístico y exclusivo.
Cuando nació la idea de Bond No.9, Rahmé pretendía que Nueva York se convirtiera en capital mundial del perfume, y devolver el arte a esta industria, que en su opinión, se había perdido desde hacía tiempo. Bond No. 9 se enorgullece de usar los más exclusivos aceites aromáticos e ingredientes de todo el mundo, con más de 60 fragancias, que reflejan en su precio y atención al detalle la belleza y el proceso de diseño de la botella.
La mayoría de perfumes femeninos han sido obra de Rahmé con algunas de las mejores narices de este sector, y se dice que contienen entre un 18 y un 22% de aceites aromáticos puros concentrados, lo que convierte a las fragancias de Bond en las más fuertes del mercado. Algunos de sus perfumes “puros” contienen una concentración del 30% de aceites aromáticos, lo que incluye su fragancia principal, Bond No. 9. Este gigante perfumero ha seguido extendiendo su colección y atesorando premios del sector, tanto para su fundadora como para los productos. En 2009 y 2012 ganó el premio FiFi y Rahmé recogió el premio en persona de “Innovadora del Año”, otorgado por la asociación Cosmetic Executive Women (CEW) en 2012.
Bond No. 9 abrió sus puertas por primera vez en 9 Bond Street en el distrito de NoHo de Manhattan con 16 fragancias originales de barrio y, hasta la fecha, han abierto 5 boutiques bautizadas con los nombres de los barrios en que se encuentran. Esta marca también se vende en boutiques de alto calibre como Saks Fifth Avenue, Harrods, Nordstrom, Hudson's Bay, Isetan y la marca y cadena de cosméticos francesa Sephora.
Sus puntos de venta exclusivos y factores que han contribuido a su éxito son el uso de los diseños de sus botellas en taxis ingleses, que han transportado a clientes y editores de medios e hicieron destacar a la marca por sus campañas de publicidad, únicas hasta la fecha. Las mujeres acuden en masa a diario a sus tiendas para comprar sus fragancias únicas de los barrios de Nueva York y Bond No.9 pronto se convirtió en símbolo de buen gusto, teniendo la empresa un toque un tanto especial, moderno, artístico y exclusivo.
Cuando nació la idea de Bond No.9, Rahmé pretendía que Nueva York se convirtiera en capital mundial del perfume, y devolver el arte a esta industria, que en su opinión, se había perdido desde hacía tiempo. Bond No. 9 se enorgullece de usar los más exclusivos aceites aromáticos e ingredientes de todo el mundo, con más de 60 fragancias, que reflejan en su precio y atención al detalle la belleza y el proceso de diseño de la botella.
La mayoría de perfumes femeninos han sido obra de Rahmé con algunas de las mejores narices de este sector, y se dice que contienen entre un 18 y un 22% de aceites aromáticos puros concentrados, lo que convierte a las fragancias de Bond en las más fuertes del mercado. Algunos de sus perfumes “puros” contienen una concentración del 30% de aceites aromáticos, lo que incluye su fragancia principal, Bond No. 9. Este gigante perfumero ha seguido extendiendo su colección y atesorando premios del sector, tanto para su fundadora como para los productos. En 2009 y 2012 ganó el premio FiFi y Rahmé recogió el premio en persona de “Innovadora del Año”, otorgado por la asociación Cosmetic Executive Women (CEW) en 2012.
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